Una novela de Juan Carlos Martín Jiménez
Perdonar nunca fue fácil. Ni en el paraíso que nos descubre la Biblia, ni en un lugar aparentemente tan maravilloso como El El Barco de Ávila.
En este pueblo perteneciente a la comunidad autónoma de Castilla y León se encuentran la Iglesia Mayor de la Asunción de Nuestra Señora y el castillo de Valdecorneja, dos edificios considerados bienes de interés cultural.
En esta novela, Martín Jiménez cruza la leyenda popular que habla de un misterioso túnel que partía del castillo, iba por debajo del río Tormes y llevaba a la llamada torre del cubo, situada sobre la ribera opuesta, con rumores sobre un párroco que, no del todo satisfecho con haber escapado de una muerte segura gracias a un túnel de idénticas características —aunque este salía de la iglesia y acababa en el castillo—, decidió hacer un pacto con el diablo.
Ajenos a esto, así como al hecho de que dentro de las paredes que forman la fantástica casa en la que están a punto de instalarse transcurrió prácticamente toda la vida de este párroco, Belén, Julián y su hija adolescente llegan en busca de una nueva vida.
Sinopsis
Nadie ha visto al Padre Anselmo en los últimos ochenta y un años, y nadie sabe si el correr del tiempo es realmente lo único que el protagonista de una trágica historia de vida necesita para perdonar.
La prueba de que dicho perdón no ha llegado todavía está en el hecho de que la nueva casa de la familia de Julián los recibe de un modo más bien particular: puertas que se cierran de golpe y que parecen dispuestas a no volver a abrirse nunca más, cortes en el cuello de un Cristo Crucificado que va cambiando de posición por sí solo, y ese calor pegajoso que parece salido del mismísimo infierno… similar al que vivió el antaño indefenso monaguillo Anselmo por causa del sacerdote con quien residía.
Infierno que se encargó de reconstruir para desgracia del acólito al cual él mismo acogió en su casa, poco después de que lo nombraran párroco del Barco de Ávila y de todos los pueblos colindantes, tras la muerte en extrañas circunstancias del Padre Juan.
Infierno cuya cercanía Belén, Julián y Paula notarán cada vez más. Entre leyendas, habladurías y secretos inconfesados, la familia saldrá en busca de un perdón difícil de encontrar.
Sobre el autor
Juan Carlos Martín Jiménez, nacido en 1967, licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense de Madrid y especializado en periodismo, ha sabido introducir una serie de acontecimientos verdaderamente terroríficos en el idílico ambiente que, aún a día de hoy, se respira en el Barco de Ávila.
El madrileño director del periódico Tetuán 30 días, con empresa propia relacionada con el ámbito de la comunicación empresarial y apasionado del atletismo y la literatura nos toma de la mano y nos invita a conocer unos pueblos por los que pasaron romanos, judíos y musulmanes.
También Nava del Barco, con su bellísima laguna y la pendiente llamada Corral del Diablo que Julián, tan deportista como su creador, no dudará en visitar.
La fascinante historia de estas dos joyas rurales, plagada de reformas y misterios por descubrir, lograría atrapar incluso a una más que rebelde adolescente disgustada ante las repentinas perspectivas de cambio que sus padres la han obligado a aceptar. Disgusto que nuevas amistades, así como nuevas especialidades locales a probar, acabarían borrando.
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